Télesis
Se trata de una “estructura performativa” elaborada en los detalles a partir y alrededor de antiguos cantos de resonancia –principalmente de tradición afrocaribeña, entre otros–y de textos anónimos originados hace más de 2000 años en el seno de las tradiciones mediterráneas egipcia, griega y judeocristiana. Algunos de los textos han sido elaborados en Télesis en forma de encantación, siguiendo antiguos patrones rítmicos y melódicos del canto bizantino. En algunos casos se ha respetado la lengua del original y en otros se han hecho traducciones al catalán intentando respetar lo máximo posible el sentido literal y el orden de las palabras en los originales.
Télesis es la nueva versión [2014] desarrollada a partir de la obra llamada Ergo. La construcción de ésta última se remonta al año 2007 y ha sido presentada regularmente ante decenas de testimonios hasta el 2010.
Télesis no es un espectáculo en sentido estricto. Si bien se trata de una estructura precisa y repetible similar a un espectáculo en el ámbito de las artes escénicas, Télesis no se orienta hacia el espectador, en el sentido de que no existe un montaje creado para su percepción ni se pretende contar una historia; se trata de un “acto”, literal y presente que se puede enmarcar en la tradición del arte como vehículo concebida por Jerzy Grotowski. Tampoco es una improvisación, una coreografía o una sesión de entrenamiento. La estructura performativa u obra se enfoca en el trabajo sobre sí mismo–en terminología de Stanislavski y Grotowski–de los actuantes y en el “proceso interior” que estos hacen a través de la pieza. Este proceso no está excluido de un espectáculo teatral, pero en el ámbito que nos ocupa se convierte en uno de los ejes fundamentales del trabajo.
Los elementos que constituyen Télesis (los cantos, los motivos textuales y la partitura de impulsos/acciones) sirven a “los que hacen” como una especie de vehículo. Como analogía, podría pensarse en un peculiar tipo de yoga artístico a través de los instrumentos/elementos propios del oficio del actor, así como de otros de naturaleza performativo-ritual. La aproximación a éstos –entendidos como herramientas, se hace desde el rigor más estricto, y la “liturgia” del evento ha sido elaborada minuciosa y artesanalmente tanto des del punto de vista de la forma (la partitura de los impulsos/acciones físicas, los contactos, los cantos y la palabra) como des del punto de vista de la “partitura vertical” (el itinerario del “proceso interior”).
Télesis, aún no tratándose de un evento estrictamente teatral, prevé y abraza la presencia de un número reducido de observadores en calidad de testimonios.
Los actuantes en Télesis (2014) son: Pere Sais, Marc Naya y Rosa Serra.